Welcome to the Inopia.

Más allá de Orión, la Puerta de Tanhauser, los Cerros de Úbeda, la cara oculta de la luna, Babia y más lejos todavía de donde Cristo perdió el gorro andan a la deriva, o más bien naufragan, mis pensamientos y reflexiones sobre las más que recalentada realidad que nos abrasa todos los días. Por eso, cuando todo se emborrona y pareciera que nada tiene sentido, me exilio en la Inopia, lugar donde encuentro el hilo de Ariadna al que agarrarme si quiero encontrar la salida del laberinto.


Sitio desnuclearizado

sábado, 5 de junio de 2010

LIBROS - PLATON Y UN ORNITORRINCO ENTRAN EN UN BAR: ENTENDER LA FILOSOFIA A TRAVES DE LOS CHISTES
Acabo de terminar en segunda lectura (en la primera no le sacas todo el jugo a los chistes) el libro “Platón y un ornitorrinco entran en un bar” de T, Cathcart y D. Klein, cuyo objetivo, y mérito nada fácil, es tratar de explicar en qué consiste eso tan raro de filosofar a través de gags humorísticos.


Para una persona que no esté familiarizada con la filosofía es un buen modo de acercarse a sus teorías, y a la vez abrir una puerta a la reflexión, pero sin dejar de reírse. Un libro muy fácil de leer, con poco más o menos de un par de páginas por corriente filosófica y un chiste de por medio. Desde el pensamiento griego antiguo hasta las corrientes filosóficas más modernas, no hay nada que Cathcart y Klein no te puedan explicar sirviéndose de un chiste. Los autores, ambos filósofos estadounidenses y guionistas de éxito, han conseguido lo que parecía imposible: enseñar el pensamiento de Platón o el existencialismo alemán con una sonrisa de por medio. “Platón y un ornitorrinco entran en un bar” demuestra que todos podemos llegar a comprender los conceptos más complejos de la filosofía occidental, sin necesidad de poseer una mente privilegiada para manejarse con soltura entre las más complejas corrientes del pensamiento filosófico.

Sobre ética encontramos, por ejemplo:

G. K. Chesterton escribió en una ocasión: “La palabra ‘bueno’ tiene varios significados. Por ejemplo, si un hombre les dispara a su madre desde una distancia de quinientos metros, cabría decir que es un buen tirador, pero no necesariamente una buena persona”. El calificativo ‘necesariamente’ es lo que nos muestra que Chesterton poseía una mente realmente filosófica.

Otro ejemplo con Heideggerde por medio:

EL CLIENTE DE UN RESTAURANTE: ¿Cómo se preparan aquí los pollos?
COCINERO: Ah, pues no hacemos nada especial. Sencillamente, les decimos que van a morir.

Y en la última página del epílogo nos explican el significado de tan original título:

El otro día Platón y un ornitorrinco se fueron a un bar. El camarero le dirigió una mirada interrogante al filósofo y Platón dijo: “¿Qué quiere que le diga? En la caverna tenía mejor aspecto”.

Bienvenido sea cualquier intento de acercar y divulgar la filosofía y la reflexión al público en general.

martes, 1 de junio de 2010

Pedro Castro y la Virgen (carta enviada y no publicada al periódico local "Al cabo de la calle").

En el número anterior de su periódico pude ver una fotografía de considerable tamaño de la Virgen de los Ángeles con un pie de foto donde se podía leer “La Virgen de los Ángeles se convierte en alcaldesa hasta el 30 de mayo”, a continuación se describía de manera más amplia la noticia, pero fue solo al final cuando el estupor me invadió por completo al leer “…y el alcalde del municipio, Pedro Castro, quien se subió a la carroza para ofrecer su bastón a la imagen, convirtiéndola en alcaldesa de Getafe durante el tiempo que duren las fiestas patronales…”.
Ante este noticia que se repite año tras año qusiera manifestar no solo mi estupor si no también mi indiganación. Porque, que la Constitución española proclame la aconfesionalidad del estado español creo sería suficiente motivo para que de una vez por todas se respetase a los, cada vez más numerosos, no creyentes, agnósticos y seguidores de otros cultos como se respeta, como mínimo, a los que se confiesan como seguidores del catolicismo. Pues, si bastante significativo es tener que soportar como se destinan año tras año un buen montante de dinero público para sufragar los gastos de la Iglesia Católica (aún en estos años de crisis todavía no he oído ni al gobierno ni a la cúpula eclesiástica católica manifestar públicamente algún tipo de contención del gasto eclesiástico) más lo es, si cabe, soportar este tipo de pleitesías y “rituales” de los que se supone nos representan a todos.

Pero por si no fuera suficiente con homenajear pública y continuamente, por parte de la mayoría de nuestros gobernantes a todos los símbolos e imágenes de la idolatría católica, añadámosle las subvenciones a colegios concertados, concesiones a bajo coste, cuando no gratis, de terrenos por parte de todas las administraciones para la construcción de nuevas parroquias y a lo que me refiero en esta carta, gastos ocasionados por la multitud de celebraciones religiosas a la lo largo del año ¿Todavía queda alguien que se atreva a afirmar que los católicos y su iglesia sufran algún tipo de persecución administrativa?

Con todo esto sigo pensando que lo que más me molesta e indigna es tener que contemplar, año tras año, la lamentable escena donde un representante de todos los ciudadanos, del ala más a la izquierda del PSOE (según sus propias manifestaciones), se sube a la carroza de una Virgen para entregarle el bastón de mando (¡¡¡símbolo de la soberanía popular entregado a un poder supremo!!!). Bonita metáfora ¿verdad?

Penoso “peaje” el que se debe pagar para seguir siendo popular y conseguir elecciones tras elecciones ese puñado de votos tan devotos…