Lo cotidiano
las cosas sencillas
lo que no tiene
importancia
o sí lo tiene
pero poco.
El beso
al vernos
después del trabajo,
el café compartido
los fines de semana,
mi brazo sobre
tu cuerpo dormido
mientras pienso
que ser feliz
(aunque sea solo a ratos)
es menos complicado
que lo que un día
nos imaginamos.
A pesar de que mañana
piense todo lo contrario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario