Welcome to the Inopia.

Más allá de Orión, la Puerta de Tanhauser, los Cerros de Úbeda, la cara oculta de la luna, Babia y más lejos todavía de donde Cristo perdió el gorro andan a la deriva, o más bien naufragan, mis pensamientos y reflexiones sobre las más que recalentada realidad que nos abrasa todos los días. Por eso, cuando todo se emborrona y pareciera que nada tiene sentido, me exilio en la Inopia, lugar donde encuentro el hilo de Ariadna al que agarrarme si quiero encontrar la salida del laberinto.


Sitio desnuclearizado

miércoles, 19 de enero de 2011

"Mamá ya no quiero ser artista, quiero ser expresidente"


Así rezaría el título y el estribillo de la vieja y conocida canción de Concha Velasco “mamá quiero ser artista”, pues los tiempos han cambiado y ahora los niños y las niñas ya no quieren ser artistas y sudar la gota gorda para llegar al ansiado triunfo. No, ahora lo que se lleva es querer ser futbolista, famoso, concejal, alcalde o simplemente político profesional. Pero el culmen de la gloria, a lo que todo niño querría aspirar es a ser presidente para después de dejar de serlo alcanzar la gloria. ¡Sí amigos, ahora lo que se lleva es querer ser expresidente de gobierno! Pues teniendo en cuenta los sueldos de por vida que cobran nuestros dos últimos (Felipe González y J.M. Aznar) y si les añadimos los que se embolsan como consejeros de dos grandes multinacionales (Gas Natural y Endesa respectivamente), el trabajo de artista queda desfasado como objetivo laboral ilusionante en el que se pueda recoger los frutos de la fama y el dinero como creía Concha Velasco.

Y los datos son bastantes claros: 80.000 euros anuales de por vida más otros 200.000 que cobrará Aznar también al año como consejero de Endesa. En el caso de Felipe González a los 80.000 hay que sumarle otros 126.500 por su faceta de consejero de Gas Natural-Fenosa. A esto, por supuesto habría que añadirle lo que cobran de sus respectivos partidos por asuntillos varios, conferencias, charlas, artículos periodísticos, “clases magistrales” en universidades, etc.. En fin, entre unas y otras cosillas se llevan un verdadero pastón mientras al resto de los mortales se nos castiga sicológicamente a diario con la crisis, la jubilación a los 67, el trabajo precario, los despidos a la carta, el paro, la subida de precios, los impuestos abusivos (hay que pagar tanto dispendio), etc…

Ya lo veis nada como hacer carrera política para “triunfar” en la vida, si entendemos como “triunfo” dar al personal por donde amargan los pepinos.

Por si queréis profundizar más sobre el bochornoso derroche de todos nuestros representantes políticos os dejo el siguiente enlace:

http://www.portaloaca.com/articulos/politica/931-el-chollo-de-ser-politico-cosas-que-todas-las-personas-deberian-saber.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario